Me he quedado sin palabras. Estremecedor.
La agencia Yariv Twig ha ideado esta acción que he visto en Ads of the world.
Cuando el calor pega fuerte es inevitable buscar algo que te te haga sentir un poco mejor, así que un golpe de frescor es algo de agradecer. En este caso Sprite se ha tomado lo del golpe de forma literal, ya que se dedica a refrescar a globazo limpio. ¿Qué marca no querría estampar su producto en la cara de sus consumidores?
Aparte de lanzar globos a la cara de los usuarios, graban a ultra cámara lenta el «ataque» para que tengan un recuerdo curioso de la experiencia que compartir con los demás.
La idea nació de la agencia israelí BBR Saatchi & Saatchi.
Visto en I believe in advertising.
Pocas marcas han sacado partido a Whatsapp, pero de vez en cuando aparece algún caso en el que se le saca un poco de jugo a los chats entre particulares. En este caso KLIK (una empresa chocolatera) lo ha hecho dando razones a la gente para escucharlos: a base de juegos.
Una variante del Simon dice vía móvil cuyos resultados han sido muy positivos, sobre todo de engagement. No se puede pedir más para un medio de difusión limitada. Este curioso advergaming en chats internos lo ha puesto en marcha la agencia israelí Great Interactive.
Visto en Ads of the world.
No sé si os acordáis, pero la semana pasada os enseñé una acción en la que un robot te llevaba de vacaciones por Italia. Pues bien, esta semana me he encontrado con una acción de Coca Cola muuuuuy parecida, pero con un componente más social. La han llamado The Social Robot.
Éste es un ingenio creado para el festival israelía Coca Cola Summer Love. Como hay gente que quiere asistir pero no puede hacerlo físicamente, la marca de refrescos ha decidido que vivan la fiesta como si estuvieran en el propio festival… pero con un robot como sustituto. Conectándose a la página del evento podrán irse de juerga por el recinto, ver los conciertos, hablar con la gente… vamos, todo lo que podrían hacer si hubieran ido, pero desde casita. Curioso que dos marcas hayan coincidido con una acción tan parecida en un periodo de tiempo tan cercano.
Fuente: Wonderful brands.
A veces es complicado cambiar la percepción de un producto según el ámbito en el que se mueve. Nos negamos a creer que, en muchas ocasiones, los alimentos que nos sirven en un restaurante son del mismo nivel que los que podemos comprar en un supermercado.
La marca de hummus Achla quiso hacer ver en Israel que su producto era de la misma calidad que el que la gente pide en los restaurantes. Y la manera más lógica de hacerlo fue crear un restaurante para que los consumidores lo confirmaran por si mismos.
Los resultados hablan por si mismos. Un test de producto hecho en el único sitio capaz de convencer a la gente de lo que querían comunicar. Muy bien pensado.La acción corre a cargo de BBR Saatchi & Saatchi.
Encontrado en Creative Criminals.