¿Habéis oído alguna vez eso de que la buena publicidad puede provocar la defunción de un mal producto? Pues es una verdad como un templo. Da igual que tus anuncios funcionen como un tiro, porque si tu producto es nefasto lo único que pasará es que los clientes descubrirán antes lo malo que es y dejarán de comprarlo.
Hay empresas que se dedican a sacar productos sin pensar muy bien en el sentido que tiene. Es el caso de Bic: una marca que ha acertado cientos de veces pero que en esta ocasión ha meado fuera de tiesto. Si no nadie podría explicar que sacasen al mercado un producto como Bic for her: un bolígrafo, en teoría, creado para mujeres sin más beneficio que venir en rosa y lila. Y todavía menos sentido tiene que intentaran darle un perfil alto haciendo que una persona como Ellen DeGeneres lo publicitara. Claro, lo que pasó fue lo siguiente:
Un fallo de cajón. No te puedes preocupar de la promoción cuando lo que falla es lo que vendes. Probablemente muchos ejecutivos, directores de marketing o jefes de producto tendrían que dejar de mirar cifras y estudios de mercado y hacerles caso a su sentido común. Seguramente les iría mejor.