Aunque todos los días nos repitan constantemente cómo está la situación en el mundo, a veces no basta sólo con eso: tenemos que verlo por nosotros mismos. Y, por desgracia, hay realidades que no podemos experimentar lo suficiente como para hacernos una idea. Por eso, la gente de Ikea ha querido acercarte un poquito a lo que puede sentir una familia normal de Damasco.

Una habitación típicamente (ahora) siria para acercarte más al drama humano que están viviendo allí y para recaudar dinero para que la Cruz Roja siga ayudando allí. La idea es de la agencia POL.

ikea-cruz-roja

Visto en Adweek.

Anuncio publicitario