Ayer descubrí trasteando por ahí el proyecto Living Memories y tenía que hablar sí o sí de él. Se trata de una iniciativa de Y&R New Zealand que quiere ayudar a reducir el número de accidentes.

Por medio de un especialista forense, proyectaron el aspecto que tendrían algunos de los niños que fallecieron en accidentes de tráfico, ilustrando lo que se ha perdido por no prestar la suficiente atención en la carretera. Terrible, pero da que pensar.

memorias vivientes

Lo he visto en Adweek.

Anuncio publicitario