Aunque la publicidad no puede mentir, lo cierto es que muchas veces lo hace. Otras veces simplemente disfraza tanto el producto que acaba pareciendo algo totalmente distinto. Por desgracia, esto hace que en muchos casos nos acabe decepcionando al mostrar una «realidad» alejada de la verdad esa. En esta infografía se muestran algunas de las razones por las que la publicidad decepciona al gran público.

El arte de la decepción

Como persona dentro del engranaje, no puedo más que abogar por una publicidad honesta, veraz y que se corresponda con la realidad. Al fin y al cabo, todos somos consumidores y no nos gusta que nos tomen el pelo, ¿no? Una cosa es elegir la mejor versión de un producto y otra muy distinta es hacer que un BigMac parezca Heidi Klum. Olvidémonos de la barra libre de Photoshop.

Edit: curiosamente unas horas después de publicar este post, me he encontrado con un experimento en el que se intenta conseguir un bocadillo similar al de la foto en establecimientos de comida rápida. El resultado parece ser relativamente satisfactorio, pero casi nunca en el primer intento. Por desgracia esto no hace más que probar que muchas veces se invierte más en comunicación que en mejorar lo que te hace grande de verdad: el producto.

Visto en Adrants.

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